Paulo Ceppi
Profesor titular de Ciencias del Clima en el departamento de Física del Imperial College de Londres
Es poco probable que en 2025 haga tanto calor como en 2024, pero la gente no debería pensar que eso significa que el cambio climático está en pausa o en una meseta.
Hay altibajos en las temperaturas globales debidos a procesos naturales, como El Niño, y un pequeño descenso no cambia la clara trayectoria ascendente en la que nos encontramos.
El calor reciente se vio exacerbado por una disminución de la cantidad de nubes y hielo marino, lo que hizo que la Tierra absorbiera más luz solar. Esto confirma las predicciones de los modelos climáticos sobre el deshielo del hielo marino y la disminución de la nubosidad a medida que el mundo se calienta.
Los países tienen el poder de detener el calentamiento global reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero a cero neto. Esto debe ocurrir lo más rápidamente posible para darnos alguna esperanza de prevenir nuevas catástrofes del cambio climático global.