Autor/es reacciones

Mª José Sánchez-Muros Lozano

Catedrática del área de Producción Animal

Los estudios son trabajos científicos bien fundamentados y describen una serie de riesgos que corre la acuicultura. Sin embargo, desde mi punto de vista, hay cierta parcialidad. Por ejemplo, se citan desventajas para la salud humana como la acumulación de tóxicos o microplásticos. Es cierto, pero ¿qué hay de los peces salvajes? Las evidencias señalan que la acumulación de tóxicos es mayor en los peces salvajes, entre otras cosas porque el mar ha sido el vertedero de la humanidad y se ha producido un efecto de bioacumulación en la cadena trófica, mientras que los peces acuicultivados son alimentados con materia previamente analizada y con trazabilidad y libres de tóxicos. Como esto hay muchos puntos a discutir en estos trabajos. En estos trabajos se identifican los riesgos de la acuicultura, lo que es imprescindible para remediarlos, pero también es verdad que la acuicultura trabaja constantemente para ser más sostenible, evitando y superando esos riesgos.

Hoy en día, desde mi punto de vista, tanto la acuicultura como la ganadería son necesarias, o más exactamente, imprescindibles, pero hay que tener en cuenta que hay sistemas de producción animal que no son sostenibles y otros que sí lo son. Ahí es donde está la verdadera cuestión: hay que definir e implantar sistemas de producción animal que se integren en una economía circular.

ES