Margarita Poza Domínguez
Investigadora en Microbiología del Instituto de Investigación Biomédica de A Coruña y profesora asociada de la Universidad de A Coruña
El microbioma humano, conjunto de microorganismos que habitan en nuestro cuerpo conviviendo con nuestras células, desempeña funciones esenciales para nuestra existencia. Además, las bacterias que viven en nuestro intestino intervienen en la eficacia y en la toxicidad de numerosos tratamientos. Es el caso de la inmunoterapia contra el cáncer, cuyo éxito se ha vinculado con la configuración de nuestro microbioma intestinal.
Hoy en día, numerosos hallazgos indican que ya es posible personalizar las terapias en función del microbioma individual de cada persona. Se abre una nueva etapa en el ámbito de la biomedicina, la farmacomicrobiómica, que consiste en el estudio de la respuesta a los fármacos basado en el microbioma. Hoy en día, la abundancia de determinadas bacterias en nuestro intestino puede predecir la respuesta a la inmunoterapia, lo cual puede evitar terapias costosas, ineficaces y/o tóxicas en numerosos pacientes con cáncer.
Aunque el trabajo se haya realizado en ratones, resalta el potencial papel de la vitamina D como modulador de la configuración del microbioma intestinal y de la respuesta inmunitaria en otros organismos, incluyendo los humanos. Se pone de manifiesto que la suplementación dietética de vitamina D puede modular el microbioma, mejorando la inmunidad contra el cáncer y la eficacia de la inmunoterapia.