Alberto J. Schuhmacher
Investigador ARAID y jefe del Grupo de Oncología Molecular en el Instituto de Investigación Sanitaria de Aragón (IIS Aragón)
Este trabajo puede representar un antes y un después en el conocimiento del cáncer de colon metastásico. El cáncer es un crimen celular organizado. Desde hace varios años sabemos ya que no todas las células dentro de un tumor son iguales, que tienen jerarquías y pueden realizar tareas diferentes y complementarias. Gracias a novedosas tecnologías que permiten estudiar dentro de un tumor qué genes se encuentran encendidos o apagados célula a célula, de manera individual, este equipo de científicos españoles liderados por Eduard Batlle ha identificado unas células de alta capacidad de recaída que son responsables de la aparición de metástasis en el hígado y el pulmón cuando se pensaba que el tumor primario estaba localizado y había sido totalmente extirpado.
Estas células son muy escasas y este trabajo nos alerta que están diseminadas en muchos pacientes en los que podríamos pensar que su tumor estaba muy localizado y se había eliminado con cirugía y los tratamientos actuales.
Este estudio describe las características genéticas de estas células con alta capacidad de recaída, lo que nos permitirá entender sus peculiaridades, desarrollar métodos de diagnóstico y también encontrar sus vulnerabilidades para desarrollar nuevas terapias. En este aspecto, el equipo de Batlle ha dado un gran paso. Han desarrollado modelos experimentales en ratones que imitan al tumor y la clínica (cirugía y tratamientos actuales). Estos modelos permiten estudiarlas, conocerlas bien para poder atacarlas, y han descubierto que pueden ser sensibles a la inmunoterapia en sus primeros momentos, cuando el tumor todavía pensábamos que estaba localizado, antes de operar y comenzar los tratamientos actuales.
En esos momentos estas células que ya se han diseminado no han amoldado el microentorno para protegerse. Esta aportación puede ser una revolución y plantea una revisión de las pautas clínicas en el tratamiento de este tipo de cáncer porque, en muchos casos, debería valorarse aplicar la inmunoterapia neoadyuvante [antes de la cirugía] o futuros tratamientos dirigidos a atacar a estas células.
Curar es más urgente que entender, pero para curar es preciso entender. Este trabajo aporta conocimiento para comprender y evitar el fenómeno de las recaídas en pacientes de cáncer de colon que presentan en el momento del diagnóstico una enfermedad localizada. Al mismo tiempo abre la puerta a diseñar nuevos métodos de diagnóstico y tratamientos. Queda recorrido y trabajo por hacer para poder entender qué hace que estas células con alta capacidad de recidiva, una vez han viajado al hígado o al pulmón, se activen para formar metástasis. Se debe entender todavía cómo se originan estas células, qué condiciona su número y por qué varia su número entre pacientes.
Este trabajo nos recuerda que vivimos en un momento decisivo en la investigación oncológica en el que se está alcanzando una tecnología y un nivel de conocimiento que permiten plantarle cara ya a muchos tipos de cánceres. Este trabajo demuestra, una vez más, que en España tenemos investigadores de primer nivel capaces realizar avances científicos de la mayor exigencia y repercusión si se proporcionan los apoyos necesarios. Es urgente e inaplazable la elaboración de un Plan Nacional de Investigación del Cáncer. O invertimos ya o pagaremos las consecuencias.