Fátima Al-Shahrour
Jefa de la Unidad de Bioinformática del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas
El premio Nobel otorgado a Baker, Hassabis y Jumper es sin duda un reconocimiento merecido y resalta entre otras cosas el gran potencial de las capacidades computacionales para resolver preguntas científicas. Sus recientes contribuciones han transformado radicalmente el campo de la biología estructural acelerando entre otras cosas la investigación en el diseño de fármacos. No es posible vivir este momento sin asombrase al comprobar que lo que antes implicaba años de investigación ahora puedes tenerlo con un simple clic, aunque detrás de ese clic también hay muchos años de investigación y trabajo. Hoy en día es sin duda la demostración con mayor impacto del uso de la inteligencia artificial que resuelve uno de los temas más complejos en biología. Es, además, un reconocimiento al área de la biología computacional y la bioinformática que en mi opinión va a continuar transformando la investigación científica.