“Tras la invasión rusa contra Ucrania, y en solidaridad con el pueblo ucraniano, la Comisión ha decidido suspender la cooperación con entidades rusas en materia de investigación, ciencia e innovación”. Así comienza la página de la Comisión Europea que informa de los proyectos de colaboración científica con Rusia.
El 3 de marzo una declaración de la comisaria europea de Investigación, Mireya Gabriel, definía la invasión de Rusia a Ucrania como “un ataque a los valores elementales de la libertad, la democracia y la autodeterminación, en los que se basan la expresión cultural, la libertad académica y científica y la cooperación científica”.
La colaboración entre instituciones académicas europeas y Rusia se había ido estrechando cada vez más en las últimas décadas.
Programa Marco Horizonte 2020
En diciembre de 2021 la Comisión informaba de los exitosos resultados de la participación de Rusia en el Programa Marco europeo para Investigación e Innovación, Horizonte 2020, para el periodo 2014-2021, destacando que “Rusia se mantiene entre los países más activos” en este programa, y anunciando que esta “buena dinámica de cooperación es una excelente base para seguir cooperando con éxito” en el próximo Horizonte Europa para 2021-2027.
Dentro de Horizonte 2020, “la UE y la Federación Rusa han apoyado proyectos científicos de colaboración en una amplia gama de áreas temáticas (…) como el cambio climático, las enfermedades infecciosas, el desarrollo de infraestructuras de investigación y un transporte aéreo más ecológico y seguro”.
Esta cooperación “se basa en el interés mutuo, la cofinanciación y el apoyo a los contactos interpersonales entre científicos, innovadores y comunidades académicas en general”, afirmaba esta nota.
“Las entidades rusas han recibido 14 millones de euros de la UE por su participación en los proyectos de investigación e innovación de Horizonte 2020, y más de 47 millones de euros de programas nacionales rusos y otras fuentes”, se informaba.
Además, 36 organizaciones rusas han participado en acciones Marie Skłodowska-Curie , con 544 investigadores rusos en estados miembros de la UE y países asociados al programa Horizonte 2020. Rusia, por su parte, acoge a 100 investigadores de la UE y de los países en Horizonte 2020. Más de medio centenar de ciudadanos rusos han recibido una de las prestigiosas becas del Consejo Europeo de Investigación.
Misiones espaciales con participación española: Euclid y ExoMars
Rusia colaboraba muy estrechamente con la Agencia Espacial Europea (ESA). Los lanzamientos de componentes y astronautas europeos a la Estación Espacial Internacional se han llevado a cabo en los últimos años con naves Soyuz rusas, lanzadas desde el puerto espacial europeo en Kourou, en la Guayana francesa. Rusia ha retirado su personal de esta base de lanzamientos.
Como consecuencia, “todas las misiones previstas para ser lanzadas por Soyuz han quedado en suspenso”, declaró la ESA el pasado 17 de marzo en un comunicado. Se trata esencialmente de cuatro misiones: Galileo M10 y Galileo M11 —integrantes del sistema de navegación Galileo—; el telescopio espacial Euclid para estudiar materia oscura; y el satélite de observación medioambiental EarthCare, para analizar las nubes y los aerosoles. La ESA estudia “servicios de lanzamiento alternativos” para estas misiones.
En Euclid, cuyo lanzamiento estaba previsto para 2023, participan el Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) España.
La nave ExoMars, con el todoterreno robótico Rosalind Franklin que debía buscar indicios de vida pasada en Marte, tampoco podrá volar en 2022, como se preveía. Uno de sus instrumentos más avanzados es el español Espectrómetro Láser Raman (RLS), diseñado y construido en el INTA.
Estación Espacial Internacional
En la misma nota la ESA aclara que el programa de operaciones de la Estación Espacial Internacional “sigue funcionando” como hasta ahora. “El objetivo principal es continuar con las operaciones seguras de la ISS, incluido el mantenimiento de la seguridad de la tripulación”.
Fusión nuclear en el ITER
En el reactor de fusión nuclear ITER, actualmente en construcción en Cadarache (Francia), Rusia cubre el 9,1 % de los costes de construcción, como los demás miembros del proyecto que no pertenecen a la UE (China, India, Japón, Corea y Estados Unidos).
Según declaraciones a SINC de su portavoz, Laban Coblentz, “no hay ningún proceso en el documento rector del ITER para expulsar a un miembro”, y recuerda que “ITER se puso en marcha como hijo de la Guerra Fría: una colaboración de países no alineados ideológicamente que compartían un objetivo común para un futuro mejor. A lo largo de la historia del ITER, las diferencias políticas entre sus miembros nunca han afectado al espíritu de colaboración. ITER es un proyecto de paz”.
CERN: la “búsqueda pacífica de la ciencia”
En el laboratorio de investigación en física de partículas CERN, cerca de Ginebra (Suiza), Rusia era hasta el pasado 7 de marzo un ‘Estado Observador con derechos especiales’. Ese día la organización comunicó que ese estatus queda “suspendido hasta nuevo aviso”, y que “el CERN cumplirá con todas las sanciones internacionales aplicables”.
La institución “expresa su apoyo a los numerosos miembros de la comunidad científica rusa del CERN que rechazan esta invasión” y recuerda que “el CERN se creó tras la Segunda Guerra Mundial para unir a las naciones y a los pueblos en la búsqueda pacífica de la ciencia”.
Sincrotrón europeo
El sincrotrón europeo ESRF, en Grenoble (Francia), “informará al personal a su debido tiempo de cualquier medida que deba adoptarse como consecuencia de esta guerra”, y reafirma “su firme compromiso de promover la excelencia científica más allá de todas las fronteras nacionales, dentro de un contexto de cooperación pacífica que prohíbe toda forma de violencia”.
Láser XFEL
El láser europeo de rayos X XFEL, en Schenefeld (Alemania), ya ha decidido que “no iniciaremos nuevos acuerdos con instituciones rusas y suspenderemos los existentes, respetando las obligaciones legales obligatorias del XFEL europeo”. Y añaden: “Estamos profundamente convencidos de que la cooperación científica puede promover la paz y de que la investigación puede prosperar mejor en una sociedad internacional democrática mediante una colaboración basada en nuestros valores europeos”.
Antiprotones e iones FAIR
La instalación para la investigación en antiprotones e iones FAIR, en construcción en Darmstadt (Alemania), declara que “los proyectos de cooperación bilateral en curso con investigadores de instituciones rusas se suspenderán con efecto inmediato”. Reconocen que estas medidas “tendrán un fuerte impacto en nuestras propias actividades, pero creemos que son necesarias en la situación actual”.
Observatorios de Canarias
En España, Rusia es miembro del Comité Científico Internacional de los observatorios del Instituto de Astrofísica de Canarias, como “países con relación bilateral con el IAC o que forma parte de los consorcios internacionales que han instalado sus instrumentos” en los observatorios de Canarias.
El IAC opera el telescopio robótico MASTER, de la Universidad de Moscú, en el Observatorio del Teide. Este telescopio participó en 2017 en la detección de una de las explosiones más energéticas del universo, los estallidos de rayos gamma
Pero, según explica a SINC este centro de investigación, las operaciones cesan a partir del 5 de marzo: “Se ha enviado una carta al profesor responsable informándole de que, debido a las circunstancias legales en nuestro país, que exigen la renovación del acuerdo con la Universidad de Moscú, y dada la invasión de Ucrania por parte de Rusia, en este momento no podemos proceder a las negociaciones necesarias para la renovación”. El IAC confía “en que pronto podamos recuperar la colaboración científica entre nuestras instituciones”.