Autor/es reacciones

Manel Juan

Jefe de Servicio de Inmunología

El estudio está muy bien diseñado y su calidad científica es indudable. Demuestra algo que ya ha sido sugerido antes muchas veces (con datos menos sólidos), como es que la vacunación personalizada con ARNm de antígenos tumorales es eficaz en inducir una respuesta y que puede, como mínimo, incrementar los periodos de supervivencia. En este trabajo se confirma que puede generar respuestas con efectos adversos claramente muy reducidos contra uno de los tumores con mayor mortalidad, el adenocarcinoma ductal de páncreas. 

El trabajo encaja perfectamente con el cada vez mayor número de trabajos que muestran evidencia de estos tratamientos. La principal aportación es que lo consigue en un tumor considerado en general poco reactivo a la inmunoterapia y reconfirma a todos los que consideramos que la inmunoterapia es una propuesta general más dependiente del estado inmunitario de la persona que no del tipo de tumor en concreto. 

La limitación más importante es que el tamaño muestral (de pacientes tratados) es claramente muy reducido y con un diseño de una sola rama sin aleatorizar. En todo caso, una vez confirmada la seguridad de la propuesta, parece que el siguiente paso a estudiar es ver si simplemente adelantar esta "vacunación" antes de dar el inhibidor del punto de control [el otro tipo de inmunoterapia utilizado] puede ser más razonable y puede permitir mejores resultados clínicos que vacunar después de administrar el anticuerpo como ha sido el caso (seguramente como criterio ético de dar primero el tratamiento que ha demostrado cierta funcionalidad, aunque fisiopatogénicamente tenga menos sentido). En todo caso es una importante aportación para el área, aunque no la podamos dar como disruptiva ni definitiva.

ES