El informe Mujeres Investigadoras 2022 ha sido elaborado por la Comisión de Mujeres y Ciencia (CMyC) del CSIC y presenta la situación de las mujeres investigadoras en el CSIC a 31 de diciembre de 2021. Estos informes, que elabora la CMyC desde 2001, se hacen siguiendo las recomendaciones de la Comisión Europea a sus Estados Miembros dentro del Espacio Europeo de Investigación. 

Una de las principales conclusiones del último informe es que sigue existiendo infrarrepresentación de las mujeres investigadoras en el CSIC.

Sociedad es el área más cercana al equilibrio de género

En algunas subáreas como Ciencias y Tecnologías Físicas y Recursos Naturales la infrarrepresentación es crónica. En 2001 el porcentaje de mujeres investigadoras en el CSIC era de un 30,9 % y 20 años después ese porcentaje se sitúa en 37,5 %. Es decir, tras dos décadas no se ha alcanzado el equilibrio de género (40/60). Mirando las tres áreas globales en las que se estructura el CSIC (Sociedad, Vida y Materia), el informe muestra que Sociedad es el área más cercana al equilibrio de género, con un 39,8 % de mujeres investigadoras, mientras que en Vida y Materia el equilibrio está más alejado, con un 37,1 % y 35,0 % de mujeres investigadoras, respectivamente.

El techo de cristal

El Índice del Techo de Cristal (ITC) en el CSIC en 2021 fue de 1,42. Este ITC muestra la dificultad de promoción de las mujeres investigadoras desde la escala de Científicos/as Titulares a Profesor/a de Investigación, y que sería 1 si no existiese ninguna dificultad en dicha promoción.

Hay que destacar positivamente que el ITC del CSIC es inferior al mostrado en las universidades españolas (1,70) y reflejado en el informe Científicas en Cifras 2021 (que elabora el Ministerio de Ciencia e Innovación) y al índice medio de las universidades y centros de investigación de la UE (1,60) recogido en el informe SHE FIGURES 2021 (que realiza la Comisión Europea, Directorate-General for Research and Innovation).  

La gráfica de tijera se convierte en pinza

Otra no buena noticia es que desde 2017 se viene observando cómo la típica gráfica de tijera de la evolución de la carrera investigadora (desde contratados/as predoctorales a Profesores/ras de Investigación) de mujeres y hombres en el CSIC cambia su forma característica hacia una pinza por el paulatino descenso en el porcentaje de contratadas predoctorales. En 2021, esta gráfica de pinza parece consolidada.

Positivo: equipo directivo e innovación

Pero el informe muestra también aspectos positivos relativos al género, que queremos destacar. Por ejemplo, el equipo directivo del CSIC (considerando presidencia, vocalías asesoras, vicepresidencias y secretaría general y adjuntas) tiene una presencia importante de mujeres, que supera el 50 %.

Muy importantes son los datos que muestran el liderazgo científico y de innovación o transferencia de la tecnología de las mujeres investigadoras del CSIC, pese a su menor representación. Más del 37 % de los proyectos nacionales vigentes en 2021 en el CSIC son liderados por investigadoras, con un importante retorno económico. A nivel europeo ese liderazgo se traduce en un 33,1 % de los proyectos dirigidos por investigadoras; con una muy importante contribución de las mujeres en proyectos de cooperación internacional.

Más del 37 % de los proyectos nacionales vigentes en 2021 en el CSIC son liderados por investigadoras, con un importante retorno económico

Desde el punto de vista de la innovación y transferencia de la tecnología, el informe muestra un incremento, con respecto a años anteriores, de la participación de las mujeres como inventoras de patentes de prioridad, ya que está por encima del 40 %, porcentaje superior al del total de las mujeres en el personal investigador del CSIC.

En definitiva, Mujeres Investigadoras 2022 muestra luces y sombras. Luces porque se ha incrementado en el CSIC la presencia de mujeres en posiciones de decisión —a ello ha contribuido muy positivamente que haya mujeres en la presidencia del CSIC— y que las mujeres investigadoras ejerzan un importante e innegable liderazgo científico e innovador. Entre las sombras destacamos esa pertinaz infrarrepresentación de las mujeres investigadoras y la dificultad en alcanzar un equilibro de género en todas las escalas científicas, muy especialmente en la de profesoras de investigación. En las últimas décadas se ha avanzado mucho en igualdad en el CSIC, pero queda trabajo por delante para conseguir que dicha igualdad sea plena.

El CSIC ha sido y es pionero en España en políticas de igualdad en la ciencia, en consonancia con las prioridades y recomendaciones europeas en igualdad de género en la investigación, y lo demuestra, entre otras facetas, que hace 20 años se creara la Comisión de Mujeres y Ciencia (CMyC), que ha sido y es motor de la igualdad en la Institución.