Carmen Romero Ferreiro
Doctora en Biología, vicedecana de Investigación en la Universidad Francisco de Vitoria y responsable de Investigación del Grado de Nutrición
Este estudio llevado a cabo en EEUU examinó la relación entre los alimentos ultraprocesados y el riesgo de muerte durante más de 30 años de seguimiento. Se basó en una amplia muestra de enfermeras y profesionales de la salud, que superaba los 150.000 participantes sin antecedentes de cáncer, enfermedades cardiovasculares o diabetes.
Esta investigación contribuye al cuerpo disponible de evidencia sobre los efectos negativos de los alimentos ultraprocesados en la salud. Se encontró que aquellos que consumían una mayor cantidad de estos alimentos tenían un riesgo ligeramente superior de muerte en comparación con los que consumían menos. Este riesgo fue especialmente notable en las muertes por enfermedades neurodegenerativas.
El estudio aporta resultados novedosos al examinar el vínculo de los subgrupos específicos de alimentos ultraprocesados con la mortalidad. Se observó que los productos listos para el consumo a base de carne, aves de corral y marisco se asociaban con una mayor mortalidad por todas las causas, al igual que las bebidas azucaradas y edulcoradas artificialmente, los postres lácteos y los productos de desayuno ultraprocesados.
Es importante tener en cuenta que la muestra consistía principalmente en profesionales de la salud, lo que limita la generalización de los resultados a otras poblaciones. Además, al ser un estudio observacional, no se puede establecer una relación causal entre el consumo de alimentos ultraprocesados y la mortalidad.
A pesar de estas limitaciones, el estudio sugiere que limitar ciertos alimentos ultraprocesados podría tener beneficios para la salud a largo plazo. Esto tiene implicaciones importantes para la práctica clínica y las políticas de salud pública, ya que aporta una evidencia más que debería tenerse en cuenta en las recomendaciones dietéticas y en la regulación de alimentos poco saludables.