Ignacio Melero
Catedrático de Inmunología de la Universidad de Navarra, investigador del CIMA y codirector del departamento de Inmunología e Inmunoterapia de la Clínica Universidad de Navarra
El artículo tiene dos partes. Lo más importante es que los autores han puesto en marcha un ensayo clínico fase 1 con una inmunocitoquina resultado de la fusión de un anticuerpo antifibronectina (L19) con el mediador de la inflamación TNF. El tratamiento, que se administra junto con quimioterapia y que parece tolerable, se ha ensayado en seis pacientes con glioblastoma que han progresado rebeldes al tratamiento convencional. Es un número muy limitado de pacientes, pero con un seguimiento sorprendentemente largo (suelen morir antes), y en tres casos la enfermedad ha remitido significativamente su tamaño.
Esperemos que estos resultados se confirmen en el resto de la serie de pacientes, que es muy corta todavía aunque sumamente prometedora.
La primera parte del artículo trata de un trabajo experimental en ratones portadores de modelos intracraneales de glioblastoma. El tratamiento experimental consiste en una inmunocitoquina, conformada por un anticuerpo cuya diana es la matriz extracelular de los tumores (rica en fibronectina) y por el factor TNF, mediador de la inflamación. Observan un efecto antitumoral relativamente discreto en los modelos y analizan los mecanismos de acción, que tienen que ver con potenciar la inflamación y con la presentación antigénica en el tumor. El parecido real de estos injertos tumores intracraneales al glioblastoma en humanos es cuestionable, pero los mecanismos puestos de manifiesto tienen interés y han dado lugar al ensayo clínico antes mencionado, cuyos primeros resultados son muy prometedores.