Este artículo se publicó hace más de 8 meses
Reacciones al vertido de aguas tratadas de Fukushima al Pacífico por parte de Japón

Este jueves 24 de agosto, Japón comenzará a verter al Pacifico las aguas residuales tratadas de la central nuclear de Fukushima, según anunció el gobierno japonés. Las aguas han sido tratadas para reducir su radiactividad. El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) ha indicado que, como recoge un informe que publicaron el mes pasado sobre este proceso, “el planteamiento y las actividades de este vertido se ajustan a las normas internacionales de seguridad pertinentes y tendrán un impacto radiológico insignificante en las personas y el medio ambiente”. 

22/08/2023 - 11:58 CEST
 
Reacciones

Hooker Fukushima

Tony Hooker

Director del Centro de Investigación, Educación e Innovación en Radiación de la Universidad de Adelaida (Australia)

Science Media Centre Australia

Me gustaría reiterar que la liberación de tritio de las instalaciones nucleares en las vías fluviales se ha realizado y se realiza en todo el mundo sin que haya pruebas de implicaciones para el medio ambiente o la salud humana. Acojo con satisfacción las noticias sobre la inminente liberación y apoyo la decisión de Japón de iniciar la eliminación y creo que cuentan con un sólido plan de gestión de la radiación que ha sido aprobado por el OIEA, la NRC japonesa y otros organismos de protección contra la radiación de todo el mundo.  

Creo que el control exhaustivo e independiente del medio ambiente en torno al lugar de vertido de Fukushima aliviará parte del miedo que se ha generado en torno a este asunto.

No declara conflicto de interés
ES

Marks Fukushima

Nigel Marks

Catedrático de Física y Astronomía de la Universidad Curtin (Australia)

Science Media Centre Australia

Dentro de un par de días, Japón empezará a verter al océano Pacífico las aguas residuales tratadas de la central nuclear de Fukushima. El principal problema del vertido es que suena mal, pero en realidad no lo es. Durante seis décadas se han producido vertidos similares en todo el mundo y nunca ha ocurrido nada malo.  

La radiactividad del agua de Fukushima es casi en su totalidad tritio, un tipo de hidrógeno. A escala, el océano Pacífico contiene 8.400 gramos de tritio puro, mientras que Japón liberará 0,06 gramos de tritio cada año. La minúscula cantidad de radiación extra no supondrá la más mínima diferencia. El marisco capturado durante toda una vida a pocos kilómetros de la desembocadura del océano tiene el equivalente a la radiación de tritio de un bocado de plátano.  

Quienes se oponen a la liberación han sugerido alternativas poco realistas y han esgrimido toda una serie de contraargumentos, pero ninguno de ellos resiste el escrutinio científico. En realidad, casi todo es radiactivo, incluido el océano Pacífico, donde el tritio representa un modesto 0,04% de la radiactividad total. A pesar de la controversia, la liberación en el océano es la única opción práctica en Fukushima, y se han tomado todas las medidas imaginables para elegir la mejor decisión que tenga en cuenta todos los factores.

Nigel Marks no ha declarado ningún conflicto de intereses. Anteriormente trabajó para la Organización Australiana de Ciencia y Tecnología Nuclear (ANSTO) y recibió financiación del Consejo Australiano de Investigación, la ANSTO y el Laboratorio Nacional de Los Álamos sobre materiales de almacenamiento de residuos radiactivos. 

ES

Irwin Fukushima

Tony Irwin

Profesor asociado honorario de la Universidad Nacional de Australia, director técnico de SMR Nuclear Technology Pty Ltd, y presidente del Panel de Ingeniería Nuclear de la División de Sídney de Ingenieros de Australia

Science Media Centre Australia

Existe una percepción comprensible de que todos los materiales radiactivos son siempre y en todas partes peligrosos, especialmente los residuos líquidos, pero no todos los materiales radiactivos lo son. El vertido de agua de Fukushima solo contendrá tritio inocuo y no es un acontecimiento único. Las centrales nucleares de todo el mundo han vertido habitualmente agua con tritio durante más de 60 años sin causar daños a las personas ni al medio ambiente, la mayoría a niveles superiores a los 22 TBq [terabecquerels] anuales previstos para Fukushima.  

A modo de comparación, la central nuclear de Kori, en Corea del Sur, vertió 91 TBq en 2019, más de cuatro veces el vertido previsto para Fukushima, y la planta de reprocesamiento francesa de La Hague vertió 11.400 TBq en 2018 en el Canal de la Mancha, más de doce veces el contenido total de todos los tanques de Fukushima, de nuevo sin daño para las personas o el medio ambiente.  

Es importante que el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) haya llevado a cabo una revisión independiente y transparente de los procedimientos y equipos de vertido y que su exhaustivo informe publicado en julio de 2023 confirme que el vertido tendrá un efecto radiológico insignificante sobre las personas y el medio ambiente. El OIEA mantendrá una presencia continua in situ para supervisar de forma independiente los vertidos. 

En la atmósfera se crea más tritio del que producen los reactores nucleares, que luego cae en forma de lluvia. Cada año cae en Japón una cantidad de tritio en forma de lluvia diez veces superior a la que se vierte. El límite de vertido de agua radiactiva en Fukushima es 1/7 de la norma de la Organización Mundial de la Salud para el agua potable. El vertido es ultraconservador.

Tony Irwin es director técnico de SMR Nuclear Technology, empresa independiente que asesora sobre el emplazamiento, desarrollo y explotación de tecnologías seguras de generación de energía nuclear.

ES

Richmond Fukushima

Robert Richmond

Director del Laboratorio Marino Kewalo de la Universidad de Hawái en Manoa y miembro del Panel de Expertos de Asesoramiento Científico del Foro de las Islas del Pacífico

Science Media Centre Australia

La decisión de Japón de seguir adelante con el vertido del agua tratada y contaminada radiactivamente no es sorprendente, pero sí decepcionante. Tanto Japón como el OIEA pueden convertir una situación difícil en una oportunidad para explorar y desarrollar mejores enfoques para los desastres nucleares que el vertido en el océano.    

Teniendo en cuenta el deterioro documentado de la salud de los océanos y de las comunidades que dependen de ellos, deberíamos esperar algo mucho mejor de quienes ocupan puestos de autoridad y responsabilidad. Esta decisión viola el espíritu de la Década Oceánica de la ONU y el recientemente aprobado Tratado de Alta Mar de la ONU, así como los derechos de las comunidades indígenas del Pacífico.    

No es el primer desastre de este tipo ni será el último, y esta decisión socava la premisa de que la industria de la energía nuclear es viable y responsable en su capacidad para hacer frente a sus propios errores y residuos. Como dice el refrán, los que no aprenden de la historia se ven obligados a repetirla, y esta acción irá en detrimento de las generaciones futuras, que probablemente sufrirán las consecuencias de decisiones que se toman basándose en la conveniencia, la política y el beneficio por encima de las personas.

No declara conflicto de interés
ES
Las 5W +1
Publica
FAQ
Contacto