Investigaciones previas han mostrado que tomar café está asociado a un menor riesgo de enfermedades cardiovasculares, pero la mayoría son estudios a corto plazo y observacionales –describen asociaciones sin poder determinar causa-efecto–. Una investigación publicada en BMJ Medicine usa un método (aleatorización mendeliana) para estudiar potenciales relaciones causales entre el nivel de cafeína en plasma y la salud cardiovascular utilizando variantes genéticas en casi 10.000 personas que participaron en estudios a largo plazo. Las concentraciones plasmáticas de cafeína más altas, predichas genéticamente, se asociaron a un menor índice de masa corporal y masa grasa, así como a un menor riesgo de diabetes tipo 2. Además, la investigación muestra que un 43 % del efecto protector de la cafeína en el riesgo de diabetes tipo 2 estaba influido por una reducción del índice de masa corporal.
Jesús Vioque - cafeína genes
Jesús Vioque
Catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública y director de la Unidad de Epidemiología de la Nutrición de la Universidad Miguel Hernández
Se trata de un estudio interesante que analiza datos de varios estudios de cohortes realizados esencialmente con población europea en los que se estimaron los niveles plasmáticos de cafeína genéticamente y se muestra una asociación protectora contra el índice de masa corporal elevado y la incidencia de diabetes tipo 2. En el estudio se ha llevado a cabo un sofisticado análisis basado en randomización mendeliana, un tipo de análisis que trata de superar las limitaciones de los estudios observacionales, simulando un estudio de intervención aleatorizado.
Los resultados apoyarían de alguna manera el conocido efecto protector del consumo moderado de café sobre el riesgo de padecer y morir por las principales enfermedades no-transmisibles (cáncer, cardiovascular, diabetes), evidenciado también en estudios de cohortes españoles. Sin embargo, no quedan claros algunos aspectos importantes como en qué medida el nivel plasmático representa el consumo habitual de cafeína y qué proporción se debe al consumo de café o al de otros alimentos como el chocolate o las bebidas azucaradas con cafeína que también contienen otros nutrientes poco saludables.
Hubiera sido interesante ver incluido el papel del consumo de café y otros alimentos aportadores de cafeína en el modelo causal representado en la gráfica. Al fin y al cabo, son estos alimentos los que se consumen y sobre los que se pueden hacer recomendaciones dietéticas.
En todo caso, el estudio aporta una evidencia muy interesante que se necesita seguir siendo investigada.
Katarina Kos - cafeína genes
Katarina Kos
Profesora Titular de Diabetes y Obesidad de la Universidad de Exeter (Reino Unido)
El estudio genético muestra vínculos y posibles beneficios para la salud de las personas con determinados genes a los que se atribuye un metabolismo más rápido del café como rasgo hereditario y, potencialmente, un mejor metabolismo. No estudia ni recomienda beber más café, que no era el objetivo de esta investigación. Y, lo que es más importante, al considerar el consumo de café y de bebidas energéticas que contienen cafeína, hay que tener en cuenta la posible compensación negativa por el exceso de calorías en forma de azúcar y grasa de muchas de estas bebidas. Incluso para la opción de aumentar el uso de bebidas con cafeína sin calorías, aún no se ha demostrado un beneficio.
- Artículo de investigación
- Revisado por pares
- Aleatorizado
- Humanos
Susanna C Larsson et al.
- Artículo de investigación
- Revisado por pares
- Aleatorizado
- Humanos