Sonia Zúñiga
Viróloga del Centro Nacional de Biotecnología (CNB-CSIC)
El anuncio de la EMA y el ECDC indica que es pronto para decidir si una cuarta dosis de las vacunas actuales es beneficiosa. Su recomendación se basa en las evidencias actuales, que indican que la población (incluyendo las personas más vulnerables) está protegida frente a enfermedad severa incluyendo la causada por ómicron.
Los estudios sobre una posible cuarta dosis realizados por el momento indican que, aunque el nivel de anticuerpos sube con la cuarta dosis, la protección frente a la infección por ómicron va a disminuir del mismo modo en que lo hace después de la tercera dosis, y no hay apenas beneficio adicional en cuanto a aumento de la protección frente a enfermedad severa.
Por ello, la EMA y el ECDC dejan abierta la posibilidad de que más adelante haya que vacunar de nuevo, por prudencia, únicamente a la población más vulnerable (mayores de 80 años). Dejan muy claro que esto no aplicaría a la población general, que ya se encuentra suficientemente protegida con las dosis actuales.
Un punto que no tratan en el anuncio de hoy es la conveniencia de que las vacunas se actualicen para ser más efectivas frente a ómicron. Las empresas fabricantes de las vacunas estaban desarrollando estas vacunas más específicas que, en caso de estar listas y ser aprobadas, en mi opinión serían una mejor alternativa para esa potencial cuarta dosis para las personas vulnerables.