antropología

antropología

Un estudio genético sobre la pelvis humana relaciona su forma con la salud del suelo pélvico y la facilidad del parto

En humanas, los canales de parto más grandes se relacionan con una marcha más lenta y menos dolor de espalda, pero mayor riesgo de artrosis de cadera; mientras que los canales de parto más estrechos se asocian con un menor riesgo de trastornos del suelo pélvico, pero un mayor riesgo de parto obstruido, según afirma un estudio. El análisis publicado en Science se basa en datos genéticos, clínicos e imágenes de densitometría ósea de más de 31.000 personas en el UK Biobank para identificar 180 posiciones genéticas asociadas a siete características pélvicas ‘altamente heredables’.

0

Describen huellas de la coexistencia de diferentes homínidos en Kenia hace 1,5 millones de años

Al menos dos especies de homínidos –Homo erectus y Paranthropus boisei– coexistieron en la cuenca del Turkana en Kenia hace aproximadamente 1,5 millones de años, según confirma un estudio publicado en Science. Los autores describen las primeras pruebas físicas de esta coexistencia en forma de huellas, encontradas en varios yacimientos de la zona. 

0

Cambio climático y DANAS más destructivas: ¿estamos preparados?

A la DANA que asoló la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre dejando a su paso más de 200 muertos y numerosos desaparecidos le ha seguido otra posterior, todavía situada sobre la península. ¿Cómo podemos adaptarnos a estos fenómenos extremos? ¿Qué repercusiones tienen en la salud pública? ¿Cómo puede prepararse la ciudadanía? El Science Media Centre España organizó una sesión informativa con dos expertos y una experta del CSIC para analizar estas cuestiones. 

0

Reacciones: los chimpancés pueden aprender socialmente, observando a sus compañeros

Los chimpancés pueden aprender una nueva habilidad al observarse mutuamente —lo que se conoce como aprendizaje social—, según un estudio publicado en Nature Human Behaviour. Los hallazgos sugieren que los chimpancés pueden tener la capacidad para la evolución cultural acumulativa, lo que se consideraba como una característica exclusivamente humana. 

0

Reacciones al estudio que encuentra restos de fetos y bebés con síndromes de Down y de Edwards de miles de años de antigüedad

Un equipo de investigadores liderados desde el Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva de Alemania ha analizado cerca de 10.000 genomas antiguos y ha encontrados seis casos de personas con síndrome de Down y una con síndrome de Edwards. En su mayoría murieron antes o poco después de nacer. Los hallazgos corresponden a diversas épocas de hasta 5.500 años de antigüedad y varios de ellos se han encontrado en Navarra. Segun los autores, “el cuidado con el que se llevaron a cabo los entierros y los objetos encontrados con estos individuos indican que las sociedades antiguas probablemente trataban a las personas con trisomías 18 y 21 como miembros de sus comunidades”. Los resultados se publican en la revista Nature Communications

0

Reacciones al estudio que afirma que un único cambio genómico permitió aumentar la formación neuronal en los humanos modernos

El cambio de un solo aminoácido en una proteína (TKTL1) podría haber dado a los humanos modernos una ventaja sobre sus contemporáneos más antiguos, como los neandertales, al permitir una mayor formación neuronal neocortical, según una investigación publicada en Science.

0

Reacciones: los humanos modernos registran menos errores cromosómicos durante el desarrollo cerebral que neandertales y simios

En comparación con los neandertales y los simios, los humanos modernos experimentan menos errores de herencia cromosómica cuando sus cerebros se desarrollan, según un nuevo estudio publicado en Science Advances. 

0

Reacción: un estudio asegura que los humanos bebíamos leche mucho antes de que pudiéramos digerirla

Un estudio publicado en la revista Nature ha encontrado que las antiguas poblaciones de humanos consumían leche durante la edad adulta mucho antes de que pudiéramos digerir la lactosa más allá de la infancia. La variante genética que nos permite hacerlo no aumentó su frecuencia por el consumo de leche, sino por las hambrunas y las infecciones, según su hipótesis.