Un estudio publicado en la revista Frontiers in Aging asegura haber desarrollado una herramienta epigenética para estimar el riesgo de muerte a partir de las células de la boca.
Adele Murrell - reloj epigenético muerte
Adele Murrell
Catedrática de Epigenética en el departamento de Ciencias de la Vida de la Universidad de Bath (Reino Unido)
En general, este es un estudio que utiliza tejido bucal (piel del interior de la mejilla) para examinar las marcas de metilación del ADN asociadas con la edad. Estudios previos han identificado las diferencias de metilación del ADN en la sangre y han desarrollado un 'reloj biológico' de predicción de la edad mediante aprendizaje automático (un ejemplo es el conocido Reloj de Horvath). Este estudio desarrolló su 'reloj CheekAge' para identificar las regiones que sufren cambios de metilación durante el envejecimiento, y luego examinó estas regiones en una población longitudinal (en este caso, las Cohortes de Nacimiento de Lothian (LBC)) y utilizó enfoques de aprendizaje automático para identificar cuáles de estas regiones podrían predecir la mortalidad, literalmente al examinar la supervivencia de individuos de diversas edades con y sin estos cambios.
Sin embargo, no pude ver nada en el manuscrito que dijera que el reloj CheekAge podrá pronosticar el día (o incluso el año) en que alguien morirá. Los cambios epigenéticos son teóricamente reversibles, por lo que, aunque es posible que se puedan usar los datos para predecir retrospectivamente cuándo alguien iba a morir, basándose en los cambios epigenéticos que se han acumulado, prospectivamente solo sería útil para advertir a las personas que podrían estar encaminándose hacia una muerte temprana debido a los cambios epigenéticos acumulados.
Dado que estos cambios son el resultado de elecciones de estilo de vida (fumar, aumento de peso, mala alimentación y falta de ejercicio) combinados con enfermedades subyacentes (cáncer, obesidad, diabetes, etc.), todos factores que son evidentes sin pruebas epigenéticas, aún no está claro si los pacientes estarán más dispuestos a cambiar sus elecciones de estilo de vida cuando se les confronte con los datos del reloj epigenético en comparación con cuando su médico de cabecera les advierte que lo hagan.
Los relojes epigenéticos ya predicen la edad biológica. Este estudio afirma llevarlo potencialmente más allá, utilizando los datos para predecir la mortalidad, pero lo hizo de manera retrospectiva, es decir, observó una población y midió la supervivencia de las personas con los marcadores del reloj epigenético. Lo que se necesita es hacer un estudio prospectivo, es decir, hacer las predicciones en personas vivas hoy y ver si mueren en el tiempo predicho. Este estudio fue muy cuidadoso y no asoció ningún marcador del reloj epigenético con ninguna edad de muerte, y el enfoque estuvo más en la precisión del uso del tejido bucal en lugar de muestras sanguíneas.
Conflicto de interés: “Sin conflictos. Uno de mis estudiantes está financiado por Nanopore Technologies para desarrollar métodos de secuenciación de metilación e hidroximetilación del ADN”.
Dusko Ilic - reloj epigenético
Dusko Ilic
Catedrático de Ciencias de Células Madre en el King's College de Londres (Reino Unido)
Si bien el desarrollo de CheekAge, un reloj bucal epigenético de próxima generación, representa un avance significativo en los biomarcadores de envejecimiento no invasivos, el uso del término 'predictivo de mortalidad' plantea preocupaciones éticas. Creo que esta frase puede ser engañosa, ya que implica una capacidad determinista para predecir la muerte, lo cual no es científicamente ni éticamente apropiado en este caso particular. En realidad, dichos relojes proporcionan evaluaciones probabilísticas de riesgo en lugar de predicciones concretas. Enfatizar la mortalidad en este contexto podría causar ansiedad innecesaria y fomentar una mentalidad fatalista en algunas personas, en lugar de promover conocimientos prácticos sobre la duración de la salud y el bienestar.
Un enfoque más matizado sería presentar CheekAge como una herramienta para evaluar la edad biológica y los riesgos de salud asociados, fomentando intervenciones destinadas a extender un envejecimiento saludable en lugar de centrarse en la mortalidad. Es esencial una comunicación clara para evitar malinterpretaciones y mantener los estándares éticos en la aplicación de estas tecnologías.
- Artículo de investigación
- Revisado por pares
- Estudio experimental
- Humanos
Shokhirev et al.
- Artículo de investigación
- Revisado por pares
- Estudio experimental
- Humanos