La enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE) es una enfermedad infecciosa no contagiosa incluida en la lista de enfermedades de notificación obligatoria de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) desde 2008. El agente causal de esta enfermedad es el virus de la enfermedad hemorrágica epizoótica (VEHE), muy similar a otros virus de gran importancia en el ámbito veterinario y ganadero, como el virus de la lengua azul (VLA) y el virus de la peste equina africana (VPEA). La EHE afecta a rumiantes, principalmente al ganado bovino y a ciervos, pero el virus puede infectar ovejas, aunque estas no presentan signos clínicos de la enfermedad. El mecanismo de transmisión del VEHE es idéntico al del VLA, ocurriendo durante la alimentación de mosquitos mordedores del género Culicoides. 

En noviembre de 2022, el Centro Nacional de Referencia de Enfermedades Exóticas de Teramo, Italia, identificó al VEHE de serotipo 8 como el agente causal de los brotes en las explotaciones afectadas de ganado bovino de Sicilia y el suroeste de Cerdeña. Tras la detección del VEHE en Italia, se detectaron los primeros brotes en el sur de España, localizados en Andalucía y Extremadura. Esta enfermedad, para la que actualmente no existe vacuna comercial, se ha confirmado a día de hoy en casi toda la península ibérica, a excepción de Cataluña, Galicia, Canarias y Baleares. 

En las explotaciones de ganado bovino afectadas, los animales infectados han presentado signos clínicos como fiebre, lesiones en mucosa bucal, cojeras por inflamación del rodete coronario e inflamación de la lengua, que remiten aproximadamente en 15 días, siendo la mortalidad inferior al 1 %. En el caso de ciervos, no todos los animales infectados desarrollan la enfermedad. En muchos casos, estos animales son asintomáticos o presentan signos muy leves. No obstante, los ciervos que manifiestan signos clínicos de la infección pueden presentar fiebre, debilidad, inapetencia y pérdida del instinto de huida. Con los datos limitados disponibles en la actualidad, generalmente la mortalidad en ciervos se sitúa por debajo del 10 %. 

La vacunación es el método profiláctico más eficaz para controlar la expansión de esta enfermedad y, de hecho, ha servido para contener exitosamente otras enfermedades similares causadas por virus como el VLA. En el caso del VEHE, solamente se han comercializado en el pasado vacunas convencionales en regiones donde el virus ha circulado causando un impacto económico significativo (fuera de la Unión Europea). Dado que al menos 7 serotipos distintos de este virus se han descrito, sería conveniente desarrollar vacunas universales que protegiesen frente a todos ellos. Este es el objetivo en el que actualmente trabajamos en nuestro laboratorio del CISA-INIA/CSIC, donde aplicamos nuestra experiencia en el desarrollo de vacunas universales de nueva generación frente a VLA y VPEA.  

Es necesario tener en cuenta que los animales que superen la infección de VEHE de serotipo 8 circulante en este momento en la península ibérica solamente quedarán protegidos frente a este serotipo, pero no frente a los otros seis serotipos. Además, considerando la circulación recurrente de otros serotipos en el norte de África y la falta de datos epidemiológicos sobre la EHE en estas regiones, la posibilidad de entrada en Europa de diferentes serotipos es elevada.