IDIBAPS
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Jefa del Servicio de Cardiología en el Hospital Clínic de Barcelona e investigadora en el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC) y en el Institut d’Investigacions Biomèdiques August Pi Sunyer (IDIBAPS)
Científica titular en el Instituto de Investigaciones Biomédicas de Barcelona (IIBB–CSIC), investigadora principal en el CIBERSAM y responsable del grupo de Neurofarmacología de Sistemas en el IDIBAPS–Fundació Clínic
Jefe del grupo de investigación Arritmias y Actividad Física del IDIBAPS, electrofisiólogo cardiaco en el Hospital Clínic Barcelona, profesor asociado de Medicina en la Universitat de Barcelona e investigador del CIBERCV
Investigadora de la Unidad de Referencia de Psiquiatría y Psicología Infantil del IDIBAPS
Jefe del grupo de Epigenómica Biomédica en el IDIBAPS de Barcelona
Psiquiatra y responsable del grupo de investigación Imagen de los trastornos relacionados con el estado de ánimo y la ansiedad de IDIBAPS
Profesor de investigación en IDIBAPS-Hospital Clínic de Barcelona y director científico del CIBEREHD – Instituto de Salud Carlos III
Psicológo clínico en el servicio de Psiquiatría y Psicología del Hospital Clínic de Barcelona y miembro del grupo de investigación Imagen de los trastornos relacionados con el estado de ánimo y la ansiedad de IDIBAPS
Investigador del IDIBAPS y director científico de la Unidad VIH del Hospital Clínic de Barcelona

Una técnica desarrollada bajo la coordinación de investigadores del Centro de Regulación Genómica (CRG) y del Instituto de Investigación Biomédica (IRB) de Barcelona ha permitido seguir patrones de metilación o ‘códigos de barras’ en las células de la sangre y construir su árbol genealógico epigenético. De esta forma, han podido rastrear su evolución y sus cambios con la edad, lo que podría servir para la prevención de enfermedades y para el estudio o incluso el desarrollo de terapias específicas frente al envejecimiento. Los resultados se publican en la revista Nature.

Los recortes en ayudas internacionales contra el VIH podrían causar entre 4,4 y 10,8 millones de infecciones nuevas entre 2025 y 2030 en 26 países de ingresos medios y bajos. Además, estas reducciones en la financiación podrían tener como consecuencia entre 770.000 y 2,9 millones de muertes relacionadas con este virus, según estima un estudio publicado en The Lancet HIV. Cinco países que juntos aportaban más de 90 % de la financiación de intervenciones internacionales contra el VIH (EE.UU., Reino Unido, Francia, Alemania y Países Bajos) anunciaron reducciones de sus ayudas entre este año y 2026, explica el artículo. Esto incluye la suspensión inmediata, en enero de 2025, de la financiación estadounidense, que representaba casi tres cuartos del total.

En quienes corren maratones, el contenido de mielina de regiones específicas del cerebro se reduce de forma reversible, según afirma un estudio llevado a cabo en el País Vasco. Esta observación concuerda con pruebas en animales que sugieren que los lípidos de la mielina –una sustancia que rodea a las neuronas– pueden actuar como reservas de energía en condiciones metabólicas extremas, como detallan los autores en Nature Metabolism. El análisis se basa en imágenes de resonancia magnética de ocho hombres y dos mujeres antes y después de correr una maratón. Según el estudio, el contenido de mielina se recuperó por completo dos meses después de la carrera.

En un grupo de personas de alto riesgo cardiovascular, el consumo de vino de bajo a moderado se asoció con menos eventos cardiovasculares (muerte cardiovascular, infarto de miocardio, ictus o insuficiencia cardiaca), según afirma un estudio. El análisis usa concentraciones urinarias de ácido tartárico, una sustancia presente en uvas y derivados, como marcador biológico del consumo de vino, y observa que consumir entre tres y 35 copas al mes se asoció con menos eventos cardiovasculares que en personas que consumieron menos de tres o más de 35 copas. El estudio, publicado en el European Heart Journal, incluyó más de 1.200 participantes del estudio español PREDIMED con una edad promedio de 68 años.

Un ensayo clínico en fase 2 ha probado en 174 pacientes la eficacia y seguridad de un dispositivo de estimulación magnética transcraneal usado en casa para tratar la depresión mayor. Tras dividirlos en dos grupos, uno de ellos recibió el tratamiento y el otro un procedimiento placebo. Después de diez semanas, ambos grupos habían mejorado sus síntomas, pero la mejora en el grupo de tratamiento activo fue 0,4 puntos mayor en la escala de depresión de Hamilton. Según los autores, que publican los resultados en la revista Nature Medicine, “potencialmente podría servir como tratamiento de primera línea en la depresión mayor”.

La salud mental de los jóvenes ha empeorado durante las últimas dos décadas y está entrando en una fase peligrosa, según sugiere una nueva Comisión de The Lancet Psychiatry. Varios factores globales están involucrados, incluyendo la inacción frente al cambio climático, la desigualdad intergeneracional y la adversidad vinculada a la pandemia de COVID-19.

Cinco de cada diez posibles tratamientos pasan de estudios en animales a estudios en seres humanos; cuatro a ensayos clínicos controlados aleatorizados; y uno de 20 pasa a la aprobación por agencias regulatorias, según estima un análisis. La concordancia entre resultados positivos en animales y en estudios clínicos es del 86 %, según el estudio, publicado en PLoS Biology, que junta las conclusiones de 122 estudios ya publicados sobre 54 enfermedades humanas distintas.

Un estudio realizado en Finlandia y que incluye a más de 700.000 adolescentes ha encontrado cierto riesgo de transmisión de algunos trastornos mentales entre compañeros de clase. Los resultados se publican en la revista JAMA Psychiatry.

Se ha publicado, con participación española, el mayor metaanálisis hasta la fecha que estudia el riesgo de que hijos de personas con un trastorno mental sufran también algún tipo de estos trastornos durante su vida. Según el trabajo, el riesgo es más del doble del que tiene el resto de la población. Para explicar el estudio y resolver las dudas que pudieran surgir, el Science Media Centre España organizó una sesión informativa con uno de los autores, el psiquiatra Joaquim Raduà.

Un equipo internacional, liderado por el Hospital Clínic-IDIBAPS junto con el King’s College de Londres (Reino Unido) y la Universidad de Dalhousie (Canadá), publica el mayor metaanálisis que haya estudiado hasta el momento el riesgo que tienen los hijos e hijas de personas con trastornos mentales de desarrollar el mismo u otro tipo de trastorno. El estudio ha incluido a más de tres millones de hijos de padres y madres con distintos tipos de trastornos y más de 20 millones de personas como población control. Los resultados, publicados en la revista World Psychiatry, indican que, en global, los primeros tienen un riesgo entre 1,5 y 3 veces mayor de desarrollar un trastorno a lo largo de su vida. Según los autores, en el caso de los trastornos bipolares, depresivos o de ansiedad, el riesgo de que los descendientes sufran algún tipo de trastorno es superior al 50 %.