El año 2024 fue el más cálido registrado en el mundo y el primer año natural en que la temperatura media mundial superó en 1,5 °C su nivel preindustrial, según ha confirmado el Servicio de Cambio Climático de Copernicus.
Ernesto - 1,5
Ernesto Rodríguez Camino
Meteorólogo Superior del Estado y miembro de la Asociación Meteorológica Española
En primer lugar debemos mencionar que los informes y notas de prensa que elabora el Servicio de Cambio Climático de Copernicus (C3S) son unos informes altamente respetados e influyentes, hasta el punto de que el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, los cita con regularidad en sus discursos sobre el clima.
En esta nota de prensa se resumen las principales características climáticas del año 2024, siendo quizá la conclusión más relevante el hecho de que haya sido el año más cálido a escala mundial desde que hay registros y el primer año natural en que la temperatura media haya superado en 1,5 °C el nivel preindustrial. El hecho de que en el Acuerdo de París las partes firmantes se comprometiesen textualmente a “proseguir los esfuerzos para limitar el aumento de la temperatura a 1,5 ºC con respecto a los niveles preindustriales, reconociendo que ello reduciría considerablemente los riesgos y los efectos del cambio climático” hace que este límite que acabamos de sobrepasar en 2024 tenga el gran valor simbólico de que lo que se está haciendo para limitar las emisiones de gases de efecto invernadero causantes de este progresivo aumento de temperatura es claramente insuficiente.
En cualquier caso, el año 2024 ha sido muy cálido, tanto en cuanto a la temperatura del aire como la de la superficie del mar, además de la contribución adicional de la fase positiva de El Niño a la tendencia subyacente al calentamiento causado por el continuo incremento de las emisiones de gases de efecto invernadero. Los límites de 1,5 °C o 2 °C establecidos en el Acuerdo de París sobre el cambio climático no se refieren a un único año específico, como ha sucedido en 2024, sino al promedio en un cierto número de años que filtre las oscilaciones anuales debido a fenómenos como El Niño. Lo que realmente importa es evitar que esa cifra se convierta en una nueva norma a largo plazo. Además, en este informe se señala el aumento en la frecuencia e intensidad de fenómenos meteorológicos extremos en todo el mundo –desde fuertes tormentas e inundaciones hasta olas de calor, sequías e incendios forestales– relacionándose con el contexto de cambio climático. De hecho, el estudio individualizado de fenómenos meteorológicos y climáticos extremos mediante estudios de atribución ha permitido estimar cuantitativamente el creciente papel del cambio climático en la ocurrencia de estos fenómenos.
Cabré - 1,5
Anna Cabré
Científica del clima asociada a la Universidad de Pensilvania (Estados Unidos)
Hace ya varios meses que vemos noticias de este tipo: que 2024 será/ha sido el año más caluroso hasta ahora. El hecho de que el límite de 1,5 °C se haya alcanzado por primera vez le da aún más urgencia a la situación. Esto subraya la necesidad de invertir más en adaptación y, sobre todo, de no perder de vista el objetivo de 1,5 °C y utilizarlo como una motivación para avanzar de manera más decidida hacia las soluciones, antes de que los extremos sean demasiado peligrosos o lleguemos a los puntos de no retorno.
Víctor Resco - 1,5 ºC
Víctor Resco de Dios
Profesor de Ingeniería forestal y Cambio global de la Universidad de Lleida
En España tenemos la impresión de que este año no ha sido particularmente caluroso porque el verano fue más suave que en los dos años anteriores. Sin embargo, a nivel global hemos alcanzado un nuevo récord de 1,5 ºC [de aumento]. El clima sienta las bases sobre las que se asienta toda sociedad: el urbanismo, la industria, el turismo, la agricultura o los bosques, por poner unos ejemplos, dependen del clima en cada zona. El cambio climático, por tanto, afecta a todos estos sectores. Hasta ahora hemos considerado que el nivel de calentamiento seguro, el que no afecta de manera crítica a la sociedad, está en los 2 ºC, una cifra que cada vez está más cerca.
Las concentraciones de CO2 siguen aumentando en la atmósfera, por lo que el calentamiento seguirá progresando y el umbral de los 2 ºC se rebasará en unas pocas décadas. Por eso la adaptación al cambio climático se torna cada vez más urgente e importante. El cambio climático no crea megaincendios ni riadas catastróficas por sí solo, pero sí que aumenta la intensidad con la que arden las llamas y descargan las tormentas. Por tanto, debemos implementar ya las estrategias que sabemos que funcionan para protegernos de estos eventos extremos. Las inundaciones del año pasado o los incendios del 2022 son apenas el tráiler del futuro que nos espera. Debemos empezar a sentar las bases para adaptar nuestras ciudades, industrias, turismo, agricultura y bosques al nuevo clima. Está en nuestra mano disminuir las consecuencias más funestas de este nuevo mundo.
Doblas - 1,5
Francisco J. Doblas-Reyes
Profesor ICREA, director del Departamento de Ciencias de la Tierra del Barcelona Supercomputing Center
La calidad del informe es excelente, como la de los años anteriores. C3S –el Servicio de Cambio Climático de Copernicus– se ha convertido en una referencia en la monitorización del estado del clima global. Su relevancia para los intereses europeos es inmensa. Es de facto la autoridad a nivel científico, y esperemos también que a nivel de políticas, en cuanto a la dimensión del cambio climático de origen antropogénico, al que se superpone la variabilidad natural del clima.
El informe confirma lo que se venía anunciando desde hace unos meses: que el año 2024 ha sido el más cálido con respecto a los registros instrumentales existentes y que por primera vez se ha rebasado el umbral de un nivel de calentamiento global de 1,5 ºC (con respecto al periodo 1850-1900) en media anual. Este hecho, que ya se previó a principios de año en los informes anuales del BSC y de la Organización Meteorológica Mundial, sitúa al sistema climático global en una trayectoria en la que la probabilidad de sobrepasar el primer umbral del Acuerdo de París, que es de un calentamiento global de 1,5 ºC a largo plazo, es cada vez más alta. Es de esperar que la tasa de calentamiento no continúe al mismo ritmo en los próximos años. La nueva serie de predicciones decadales que estarán disponibles en febrero nos informarán sobre la probabilidad de que esto ocurra.
Mientras que el informe pone mucho énfasis en el calentamiento en los océanos globales, que es en parte una continuación de los niveles extraordinarios alcanzados en 2023, el calentamiento sobre gran parte de los continentes es muy llamativo. Dado el interés de lo que está ocurriendo, la comunidad científica está trabajando para identificar las razones físicas, más allá del aumento de la concentración de gases de efecto invernadero, que han producido dos años seguidos con temperaturas tan altas.
No se sabe aún el ritmo al que seguirá aumentando la temperatura global. Para ello necesitamos las nuevas predicciones decadales y un análisis detallado de los factores (cambios en los aerosoles antropogénicos, volcánicos, biogénicos y minerales, contenido de calor del océano, variabilidad natural en el océano, etc.), que están detrás de lo que ha ocurrido en 2023 y 2024. El BSC está trabajando con C3S y otras instituciones internacionales en ambos sentidos.
Otto _ 1,5
Friederike Otto
Profesora titular del Centro de Política Medioambiental del Imperial College de Londres (Reino Unido)
Este récord tiene que ser un baño de realidad. El clima se está calentando hasta niveles que llevamos años intentando evitar porque los países siguen quemando enormes cantidades de petróleo, gas y carbón.
Un año de condiciones meteorológicas extremas ha demostrado lo peligrosa que es la vida a 1,5 ºC. Las inundaciones de Valencia, los huracanes de Estados Unidos, los tifones de Filipinas y la sequía del Amazonas son solo cuatro de las catástrofes del año pasado que se vieron agravadas por el cambio climático. Hay muchísimas más.
El mundo no necesita inventar una solución mágica para evitar que las cosas empeoren en 2025. Sabemos exactamente lo que tenemos que hacer para abandonar los combustibles fósiles, detener la deforestación y hacer que las sociedades sean más resistentes a los cambios climáticos que vemos tan claramente en este informe.
Rogelj - 1,5
Joeri Rogelj
Director de Investigación del Instituto Grantham de Cambio Climático y Medio Ambiente del Imperial College de Londres
Un solo año con temperaturas 1,5 °C por encima de los niveles preindustriales no significa que hayamos alcanzado 1,5 °C de calentamiento global. Sin embargo, sí significa que nos estamos acercando peligrosamente.
El Acuerdo de París establece límites al calentamiento global no por conveniencia, sino por la necesidad de limitar el daño y el sufrimiento de las personas. Incluso si superamos los 1,5 ºC a largo plazo, estas razones no cambian.
Cada fracción de grado —ya sea 1,4, 1,5 o 1,6 °C— conlleva más daños para las personas y los ecosistemas, lo que subraya la necesidad permanente de recortes ambiciosos de las emisiones.
Aunque el año más caluroso jamás registrado es alarmante, la necesidad de actuar tiene más sentido que nunca: el coste de la energía solar y eólica está disminuyendo rápidamente y ahora es más barata que los combustibles fósiles en muchos países. Los gobiernos pueden construir economías sanas con medidas más firmes y decisivas para acelerar la transición a las energías limpias.
Ceppi - 1,5
Paulo Ceppi
Profesor titular de Ciencias del Clima en el departamento de Física del Imperial College de Londres
Es poco probable que en 2025 haga tanto calor como en 2024, pero la gente no debería pensar que eso significa que el cambio climático está en pausa o en una meseta.
Hay altibajos en las temperaturas globales debidos a procesos naturales, como El Niño, y un pequeño descenso no cambia la clara trayectoria ascendente en la que nos encontramos.
El calor reciente se vio exacerbado por una disminución de la cantidad de nubes y hielo marino, lo que hizo que la Tierra absorbiera más luz solar. Esto confirma las predicciones de los modelos climáticos sobre el deshielo del hielo marino y la disminución de la nubosidad a medida que el mundo se calienta.
Los países tienen el poder de detener el calentamiento global reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero a cero neto. Esto debe ocurrir lo más rápidamente posible para darnos alguna esperanza de prevenir nuevas catástrofes del cambio climático global.
- Informe
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