La mayor parte del carbono secuestrado en la tierra está encerrado en depósitos no vivos
Un estudio revela que la mayor parte del dióxido de carbono (CO2) absorbido por los ecosistemas se ha almacenado en material vegetal muerto, suelos y sedimentos, y no en biomasa viva. Estos datos, que sugieren que las reservas de carbono terrestre son más resistentes y estables de lo que se creía, son cruciales para diseñar futuras estrategias de mitigación del cambio climático y optimizar los esfuerzos de secuestro de carbono. Los hallazgos se publican en la revista Science.