CREAF
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Coordinadora científica del CREAF que ha asistido a la COP28 de Dubái
Miembro del equipo de investigación Agua y Cambio Global del Centro de Investigación de Ecología y Aplicaciones Forestales (CREAF), en la Universidad Autónoma de Barcelona
Investigadora postoctoral del Institut de Biologia Evolutiva (CSIC- Universitat Pompeu Fabra)
Profesor de investigación del CSIC en el CREAF (Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales)
Investigador del CREAF. Investigador asociado al CTFC
Investigador del CREAF, miembro del MedeCC (Expertos Mediterráneos en Cambio Climático y Medio Ambiente) y autor del informe MAR1
Catedrático de Ecología de la Universidad Autónoma de Barcelona e investigador del CREAF
Investigador del CSIC en el CREAF y co-coordinador del Laboratorio de Biodiversidad y Ecología del Paisaje
Investigador de CREAF-Instituto Catalán de Ornitología
Tras una intensa noche de negociaciones en Dubái (Emiratos Árabes Unidos), los países participantes en la COP28 llegaban a un acuerdo histórico al mencionar por primera vez “transitar para dejar atrás los combustibles fósiles” en el documento del Balance Global —la evaluación de los progresos hechos para conseguir los objetivos climáticos que se fijaba en el Acuerdo de París—. El acuerdo llega después de que el primer borrador presentado por la presidencia no hiciera esta mención —se refería solo a “reducir el consumo y la producción” de estos combustibles—, por lo que fue calificado como “inaceptable” por países como España.
Las lluvias torrenciales caídas en Libia hace dos semanas fueron 50 veces más probables por el calentamiento global provocado por la acción humana. Algo similar ocurría con las lluvias caídas en Grecia, Bulgaria y Turquía, que fueron 10 veces más probables por el cambio climático, según concluye un estudio de atribución rápido de la Word Weather Attribution (WWA). La investigación apunta a que la tragedia en Libia se agravó por otros factores humanos, como construcciones en llanuras inundables y presas en mal estado. Los autores también analizaron las inundaciones registradas en España a principios de septiembre y concluyeron que precipitaciones tan intensas se esperan una vez cada 40 años.
Con la sequía meteorológica prolongada en la que nos encontramos nos centramos demasiado en el clima como su causa, mientras que falta debate sobre el verdadero problema: la demanda crónica de agua. Es necesario replantear los modelos de consumo con todos los actores de la sociedad y las administraciones competentes. Un futuro adaptado al cambio climático debe abordar la sequía priorizando la restauración de nuestros sistemas hídricos y cuestionando el actual modelo de desarrollo.
La sequía hidrológica, meteorológica y agrícola que se está viviendo en España, especialmente en algunas regiones, llega tras un 2022 que fue el más cálido y uno de los más secos desde que se tienen registros. Las investigadoras Sandra García Galiano (UPCT) y Annelies Broekman (CREAF) participaron en una sesión informativa del SMC España en la que analizaron las causas, consecuencias y posibles soluciones con las que afrontar este complejo fenómeno natural.
Los gobiernos reunidos en la Conferencia sobre Biodiversidad COP15 de Montreal (Canadá) han llegado a un acuerdo tras dos semanas de negociaciones. El "Marco Mundial para la Biodiversidad de Kunming-Montreal" pretende proteger un tercio de la tierra y los océanos de aquí a 2030.
Tras dos largas semanas de negociaciones y fuera del plazo oficial, la COP27 ha cerrado el acuerdo de crear un fondo de pérdidas y daños que ayude a los países más vulnerables a afrontar los impactos de la crisis climática. Sin embargo, otras cuestiones como una mayor ambición en estrategias de mitigación para no superar los 1,5 ºC de calentamiento y menor dependencia de los combustibles fósiles no han conseguido el compromiso de todas las partes.
Un estudio publicado en la revista Science analiza los posibles beneficios climáticos de la forestación –tanto plantar árboles para crear nuevos bosques como reforestar antiguos– de las tierras áridas del planeta. Los autores demuestran que el efecto de enfriamiento de la forestación de esta vasta zona solo equivaldría a una disminución de aproximadamente el 1 % de las emisiones de gases de efecto invernadero previstas en los escenarios climáticos de emisiones medias y sin cambios.
Un estudio publicado en Nature muestra que, ante fenómenos climáticos como sequías e inundaciones extremas, que probablemente aumentarán como consecuencia del cambio climático, las estrategias de gestión de riesgo pueden no ser suficientes. El trabajo analiza 45 pares de datos de este tipo de eventos con una media de 16 años de diferencia, entre ellos, las inundaciones de Barcelona en 1995 y 2018.
Un estudio publicado en PNAS plantea el peor escenario del cambio climático actual, explica la probabilidad de que este ocurra y analiza las consecuencias devastadoras que tendría. También incluye un programa de investigación para afrontarlo.
El cambio climático está provocando una extinción masiva de especies pero para las aves, esta pérdida de biodiversidad tiene implicaciones que van más allá. En una investigación publicada en la revista Current Biology, los investigadores utilizan modelos estadísticos para predecir que esta extinción disminuirá la diversidad morfológica entre las aves restantes a un ritmo mayor que la pérdida de especies por sí misma.