Centro Nacional de Microbiología - Instituto de Salud Carlos III
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Investigadora en el Laboratorio de Referencia e Investigación en Micología del Centro Nacional de Microbiología, Instituto de Salud Carlos III
Científico titular en el Laboratorio de Investigación y Referencia en Patógenos Especiales del Centro Nacional de Microbiología del Instituto de Salud Carlos III
Investigador del Centro Nacional de Microbiología - Instituto de Salud Carlos III
Científico titular en el Laboratorio de Referencia de Gripe y Virus Respiratorios del Centro Nacional de Microbiología
Investigador científico del Laboratorio de Referencia e Investigación en Enfermedades Víricas Inmunoprevenibles del Centro Nacional de Microbiología-Instituto de Salud Carlos III
Investigadora titular, responsable de la Unidad de Enterovirus y Gastroenteritis Víricas (Laboratorio de Referencia e Investigación en Enfermedades Víricas Inmunoprevenibles), Centro Nacional de Microbiología, Instituto de Salud Carlos III
Viróloga del Laboratorio de Referencia de Gripe y Virus Respiratorios del Centro Nacional de Microbiología-Instituto de Salud Carlos III
Investigadora del Laboratorio de Referencia de Gripe y Virus Respiratorios en el Centro Nacional de Microbiología - Instituto de Salud Carlos III
Una revisión publicada en Science calcula que un 2 % de las especies de roedores son hiperreservorios, al hospedar y transmitir más de tres patógenos a los seres humanos, incluyendo la enfermedad de Lyme, la fiebre de Lassa y la peste. Además, los autores estiman que un 10 % de los roedores son reservorios de uno a tres patógenos. Se trata especialmente de especies denominadas sinantrópicas —animales que viven cerca de los humanos y son capaces de adaptarse a estos entornos— como por ejemplo la rata negra, la rata noruega y el ratón doméstico.
Investigadores del Instituto Nacional de Salud Pública de Francia han identificado los patógenos prioritarios para la vigilancia de las aguas residuales durante los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París —que se celebrarán del 26 de julio al 11 de agosto y del 28 de agosto al 8 de septiembre, respectivamente—. Los seis patógenos seleccionados, tal y como recoge la revista Eurosurveillance, fueron el poliovirus, el virus de la gripe A, el virus de la gripe B, el virus mpox, el SARS-CoV-2 y el virus del sarampión. Su elección se basó en tres criterios: viabilidad analítica, relevancia respecto a los Juegos Olímpicos y características de los patógenos, y su valor para informar a las políticas de salud pública. En las últimas semanas, se han encontrado niveles de la bacteria E. coli superiores a los recomendados en el río Sena, según recoge Associated Press.
A pesar de que los brotes de gripe aviar H5N1 han alcanzado cifras récord en los últimos años, las infecciones humanas siguen siendo anecdóticas. Un estudio publicado hoy en Nature identifica una proteína responsable de inhibir la replicación de este virus en seres humanos, mientras que las gripes ‘humanas’ son capaces de evadirla. Los autores proponen que esta proteína con actividad antiviral evolucionó en primates y consideran que la resistencia o sensibilidad a ella deben ser tenidas en cuenta a la hora de evaluar el potencial zoonótico de los virus de la gripe aviar.
El pasado 5 de abril, el Punto Nacional Focal IHR del Reino Unido informó a la OMS de un aumento de miocarditis grave en neonatos asociada a infección por enterovirus en Gales (Reino Unido). Entre junio de 2022 y abril de 2023, se descubrió que diez neonatos hospitalizados con una PCR positiva para enterovirus tenían miocarditis. En siete de los diez casos se confirmó la presencia de coxsackie B3 o coxsackie B4. A 5 de mayo de 2023, un paciente seguía hospitalizado y otro había fallecido. Según el comunicado de la OMS, aunque las infecciones por enterovirus son frecuentes en neonatos y bebés, el aumento notificado de miocarditis —inflamación del tejido muscular del corazón— con desenlace grave asociadas a infección por enterovirus es inusual.
Un estudio que está pendiente de publicarse en la revista Actas Dermo-Sifiliográficas analiza un brote de tiña que ha afectado a cientos de adolescentes españoles en los últimos dos años.
Pasado el Mundial de fútbol de Catar, la investigadora del Centro Nacional de Microbiología María Iglesias se pregunta de dónde partió la alarma social acerca de un supuesto brote de MERS y aprovecha para explicar algunos conceptos del virus y su vigilancia.
Varios medios de comunicación están anunciando la aparición de casos de “virus del camello” o MERS-CoV en el Mundial de fútbol de Catar, incluyendo alguno de ellos a tres jugadores de la selección francesa. Sin embargo, ningún caso ha sido confirmado y las noticias hablan de síntomas inespecíficos que podrían deberse a cualquier otro cuadro infeccioso. Este coronavirus, descubierto en el año 2012, tiene una alta tasa de letalidad y antes de que diera inicio la competición la OMS ya había pedido a los aficionados que viajasen al país que vigilaran posibles síntomas.
La OMS ha publicado la primera lista de patógenos fúngicos prioritarios, que afectan a más de 300 millones de personas y consiguen acabar con la vida de, como mínimo, un millón y medio personas cada año. Sin embargo, los fondos destinados a controlar esta lacra no llegan ni al 1,5 % de los que se dedican a las enfermedades infecciosas.
Un sarbecovirus emparentado lejanamente con el SARS-CoV-2 y encontrado en murciélagos de herradura en Rusia es capaz de entrar en las células humanas usando el receptor ACE2, según una investigación publicada en PLOS Pathogens.
La Agencia de Seguridad Sanitaria de Reino Unido publicó en su último informe del 25 de marzo la detección de tres formas recombinantes de ómicron, llamadas XE, XD y XF. La OMS las menciona en su informe del 29 de marzo, señalando que la posibilidad de que XE sea más transmisible que BA.2 requiere todavía de más estudios.