Interesante y novedoso análisis sobre la asociación entre problemas de conducta psicosocial y hábitos de consumo de desayuno, incluida la calidad del desayuno y lugar de consumo en niños y adolescentes españoles entre 4 y 14 años. Los autores han analizado datos de la Encuesta Nacional de Salud (2017), lo que presenta la ventaja de incluir una amplia muestra, pero también algunas limitaciones al estudio y así lo reconocen los autores.  

Por un lado, se trata de un estudio transversal, es decir, ofrece una imagen instantánea de la situación; toda la información se ha recogido en el mismo momento. Como afirman los autores, han observado una asociación entre el consumo usual de desayuno, calidad del desayuno y desayunar en casa con menor probabilidad de problemas psicosociales. Por otra parte, la información sobre hábitos de consumo alimentario permite considerar algunos indicadores, pero no permite estimar la ingesta habitual y otros detalles que serían necesarios para valorar la asociación observada, por lo que será necesario profundizar en el análisis del problema con otros estudios con diseño y protocolos adecuados para ello. 

Aunque se han suscitado algunas controversias, distintas investigaciones han evidenciado que el consumo habitual de un desayuno adecuado de calidad en escolares y adolescentes, especialmente si se consume en casa, dedicando tiempo suficiente y en compañía se asocia con indicadores favorables sobre las características nutricionales de la dieta usual, la salud y el bienestar. Los resultados del estudio de López-Gil y colaboradores coinciden en este sentido.

Este estudio es un análisis de los niños de 4 a 14 incluidos en la Encuesta Nacional de Salud de 2017. Por lo tanto, no es un estudio específica y exclusivamente diseñado para estudiar los problemas psicológicos de la infancia en relación con los patrones de dieta o los comportamientos alimentarios.  

Como tal, tiene las limitaciones propias de las preguntas y el diseño incluidas en una encuesta que se realizó en un momento en el tiempo. Un problema clave es que los niños y niñas que no toman el desayuno en casa o que toman desayunos de peor calidad nutricional son, en un alto porcentaje, aquellos que tienen padres y madres trabajando muy temprano o que tienen ingresos más bajos, con un menor nivel educativo, es decir, niños de menor nivel socioeconómico. A su vez, los niños de menor nivel socioeconómico son más propensos a tener problemas psicológicos en la infancia por muchas y diferentes razones. 

Otra limitación importante del estudio es que se realizó en 2017 y la pandemia ha influido mucho tanto en el nivel socioeconómico de las familias en España, como en su dieta y en los problemas psicológicos de la infancia. Por lo tanto, este tipo de estudios/análisis se deberían repetir en la actualidad.  

La evidencia actual nos muestra que cada vez son más hogares y familias en España las que sufren inseguridad alimentaria, y que muchos niños y familias vulnerables no tienen una alimentación adecuada, ni siquiera en una comida diaria. Por ello se han incluido en toda Europa, en el Plan de Garantía Infantil, medidas para que los centros educativos ofrezcan al menos una comida diaria saludable con un foco especial en aquellos niños en situación de pobreza o riesgo de exclusión social. España ha sido uno de los siete países de la UE donde se realizó un estudio en profundidad sobre los servicios básicos de educación, salud, nutrición y vivienda en condiciones de igualad para combatir la pobreza infantil y sus consecuencias.