El director de la Estrategia de Vacunas de la Agencia Europea del Medicamento (EMA), Marco Cavaleri, dijo el 11 de enero en rueda de prensa que “no es sostenible a largo plazo seguir dando dosis de recuerdo cada tres o cuatro meses [a la población general]”. Inmunólogos españoles coinciden en que no es lo adecuado. En estas reacciones explican por qué.
Personal sanitario prepara una vacuna contra el coronavirus. EFE/Doménech Castelló / POOL
Marcos López Hoyos - refuerzos vacunación
Marcos López Hoyos
Presidente de la Sociedad Española de Inmunología (SEI), director científico del Instituto de Investigación Sanitaria Valdecilla (IDIVAL) y profesor de Inmunología de la Universidad Cantabria
La estrategia de booster repetidos no parece tener mucho sentido en el momento actual. El repetir un booster con el mismo preparado de la vacuna original frente al virus original de Wuhan no parece tener mucho sentido si queremos inducir anticuerpos neutralizantes frente a las nuevas variantes. Deberían incluir al menos alguna de las variantes como delta u omicron. En todo caso, la respuesta de células T que nos protege se ha inducido ya y no se precisa nuevos booster para la parte de células T memoria. Además, lo ideal sería estimular con el booster la respuesta frente a otros componentes del virus y no necesariamente frente a la proteína S. Por ello, el booster que induce una infección tras la vacunación completa es incluso más potente y efectiva que un booster. La estrategia de booster cada pocos meses no parece aportar valor. Tampoco hay datos de que sea perjudicial, aunque tampoco hay evidencias claras al respecto.
África González - refuerzos vacunación
África González-Fernández
Investigadora de CINBIO, catedrática de Inmunología de la Universidad de Vigo, académica de la RAFG y autora del libro divulgativo Inmuno Power: conoce y fortalece tus defensas (2021)
No tiene sentido una estrategia basada en boosters cada pocos meses, ni es recomendable. El sistema inmunitario puede agotarse, estar exhausto, y conseguir el efecto opuesto frente a la misma vacuna. Muchas inmunizaciones repetidas en el tiempo inducen tolerancia, menor respuesta, y se ha visto que afecta también a la calidad de los anticuerpos. Además podrían darse problemas por exceso de anticuerpos. Esto aún no lo sabemos con esta vacuna. El ensayo clínico en Israel con 4 dosis dará información valiosa al respecto.
Manel Juan - refuerzos vacunación
Manel Juan
Jefe de Servicio de Inmunología
No tiene sentido una estrategia basada en boosters cada pocos meses sobre todo porque lo que aporta es poco en comparación con la vacunación completa. Para ómicron es muy poco. Y en absoluto mientras estas "terceras dosis" nos lleven a olvidar lo realmente importante: VACUNAR A TODA LA POBLACION MUNDIAL.
José Gómez Rial - refuerzos vacunación
José Gómez Rial
Jefe de Servicio de Inmunología en el Complejo Hospitalario Universitario de Santiago de Compostela (CHUS), Servicio Gallego de Salud (SERGAS)
Como estrategia generalizada para toda la población, una estrategia basada en boosters cada pocos meses es un despropósito desde el punto de vista inmunológico. Como estrategia para los grupos vulnerables puede tener sentido, pero sería muy aconsejable actualizar la vacuna a la variante omicron y centrar el booster solo en este grupo de población y con monitorización estrecha de pérdida de efectividad vacunal. Echo muchísimo de menos estudios de inmunidad celular + Ac, en este grupo de pacientes tan vulnerables en los que necesitamos saber en qué momento pierden la protección frente al virus.
No obstante, dudo de que poner boosters cada pocos meses sea nocivo. Nuestro sistema inmune está preparado para responder sobradamente a multitud de estímulos al mismo tiempo. Pero las reacciones secundarias a la vacunación (adenopatías por ejemplo) se multiplicarían, la reactogenicidad a la vacuna, las molestias, etc. Boosters repetidos en población general lo único que producirían es un rechazo masivo a la vacunación, y convertiríamos el éxito de programa de vacunación (en nuestro país) en un fracaso por abusar sin sentido de las vacunas.